ver todas las noticias noticias

Club Maltería de Hudson: volver a nacer

JULIO | 2013

Allá por la década del 80 el Club Maltería formó a muchos chicos que crecieron y se desarrollaron en sus instalaciones . Hoy, a casi 20 años de su cierre, esos mismos chicos volvieron con una sola intención: devolverle la vida. Germán Mateos, uno de los refundadores, nos cuenta la historia.


        imprimir

HoySeJuega : ¿Cómo fue que surgió el proyecto de restaurar club Maltería?

Germán: En el año 94/95 el club se cerró, porque pertenecía a la Cervecería Quilmes y con él se fue toda nuestra niñez, todo lo que tuvo que ver con la escuelita, con la gimnasia y con una generación que fuimos criados ahí. Nosotros seguimos jugando al fútbol, nos seguimos llamando Maltería, ibamos al rio de Quilmes y seguíamos participando en torneos. El asunto es que uno de nuestros jugadores, es Patricio Mussi, que ahora es el Intendente de Berazategui, y él junto con su padre, compraron, en una negociación bastante ardua con los dueños del predio, el club Maltería para poder restaurarlo.

HSJ: La restauración del club implica recuperar un poco de espacio verde en el medio de una localidad que poco a poco se ve rodeada de countrys, de negocios y de mucho gris. ¿Se plantearon eso como objetivo?

G: Sí, uno de los objetivos que teníamos era mantener un espacio verde dentro del crecimiento que viene teniendo Hudson y de los embates que viene sufriendo con los countrys. A partir de ahí nos juntamos, hay como si fuese un grupo fundador de amigos, dónde lo que se hizo fue comprar todo lo necesario y poner todo más o menos en condiciones para poder volver a jugar en esas canchas que para nosotros son todo un emblema. Seguimos así y estuvimos casi un año jugando en Zucamor -campeonato de la zona- para luego pasar a la liga amateur de Don Bosco, que es bastante más competitiva. Entramos en el 2011 durante un torneo de verano, fuimos campeones y luego ya en el 2012 , en el torneo largo, volvimos a repetir el título. Ahí fue cuando empezamos a equiparar lo amateur con lo profesional, nos pusimos a entrenar martes y jueves, jugamos el domingo con entrada en calor, con desayuno previo y de esa forma un montón de gente que estaba fuera del grupo de fútbol nos empezó a seguir y a hacer gimnasia, por lo que fuimos recuperando la mística que tenía Maltería. Ahora todos los martes y jueves hay entrenamiento libre y lo único que se pide para participar es un bono contribución para la cooperativa. El año pasado, además, se volvió a inaugurar la escuelita de Hugo Mateos que había sido emblema del lugar durante los 80.

HSJ: Desde la primera vez que decidieron llevar adelante ésto al presente ¿qué cambios se produjeron en el club?

G: Se remodeló el quincho, que era el mismo que nosotros usabamos cuando eramos chicos, y hoy por hoy se puede usar como cualquier quincho para cualquier reunión social. Después se hicieron vestuarios, tanto local como visitante, y se está haciendo un Buffet que va a funcionar como restaurant - se espera para mediados de agosto- más un salón de eventos que está quedando muy lindo. Además se tomó la decisión más importante que fue la de hacer que la cancha grande, la principal, sea sintética y tenga el mismo pasto que Boca y River, por lo que va a ser la primera cancha de zona sur que tenga un sistema que cuando el clima no deja jugar al fútbol permite que se pueda jugar igual. ¿Qué se quiso hacer con esto? primero que no se puedan suspender entrenamientos y segundo que ante tanta actividad, tanto impacto social que causó, la cancha se pueda usar, aguante bien y no sea más de tierra. A partir del mes que viene el municipio va a tener una cancha de primer nivel - es raro que River o Boca te dejen jugar en su cancha gratis- en la que se puede jugar por más que llueva, haga frío o haya tormenta y todo de forma gratuita.

HSJ: ¿Qué tan importante crees que fue socialmente la restauración del club? Más teniendo en cuenta que Hudson tenía una deuda grande en cuanto a esta clase de espacios.

G: Fue importante porque se logró recuperar un espacio que contribuye a restaurar un poco lo social en un lugar como Hudson que, como decís vos, parecía perdido socialmente. Las ganas siempre estuvieron y sólo faltaba el lugar. Ahora lo tenemos y lo lindo es que estamos llevando a nuestros hijos al mismo lugar que nos llevaban nuestros padres.

HSJ: ¿Qué planes hay a futuro?

G: Hoy por hoy nosotros no tenemos ningún equipo de jugadores menores de 35 años que pueda competir, entonces desde lo futbolístico quizás vaya por ese lado. La escuelita de fútbol sigue funcionando y la idea es que siga en ese plan y mejore día a día. Después va a haber un grupo de profes que si vos vas a caminar y no sabés mucho te pueden asesorar, un gimnasio, una pista aeróbica para la gente que no puede correr, una pileta y varias cosas más. Principalmente la idea es que la gente entienda que Maltería no es más privado, que resurgió y que ahora todos pueden venir.

HSJ: El deporte implica actividad social y es bueno para la salud, eso está claro. Sin embargo, a medida que este se vuelve más competitivo pueden ocurrir lesiones ¿está preparado el club para eso?

G: Está funcionando, y esto es importantisimo que se sepa, un departamento de rehabilitación en el ex club Ducilo que está a cargo de dos médicos kinesiologos que te tratan como futbolista. Entonces, la recuperación de las lesiones es justamente como la de un jugador profesional. Por ejemplo, nosotros el año pasado tuvimos la fractura expuesta de uno de los chicos y fue tratada ahí como si fuese un deportista de elite. Esto también es abierto para todo el mundo y además de tratar lesiones te enseñan a vendarte, a hacerte un estribo, a hacer ejercicios y entender que una persona que se lesionó tiene que seguir haciendo cosas. Ese cambio de mentalidad es el que estamos tratando de implementar a partir de Maltería.

HSJ: ¿Ese cambio de mentalidad que planteas sería que la gente empiece a tomarse un poco más en serio el deporte?

G: Lo difícil es lograr que la gente entienda y use todo lo que tiene. La idea es que alguien que tiene un esguince, por ejemplo, se comunique ahí y trate esto como un deportista, no como cualquiera que dice, listo, me pongo un poco de hielo, espero 15 días y después veo como sigo avanzando.

HSJ: ¿Se podría decir entonces que Maltería es un club que a partir del entusiasmo de un equipo de fútbol amateur logró resurgir?

G: Simbólicamente es así. Esto es como cuando vos tenés 18 o 20 años, te ponés de novio, no tenés nada y te dan un lote. Sumale encima que en ese lote vos tuviste historia. Y bueno, al principio cortás el pasto, le ponés toda la onda y te dan ganas de arreglarlo todo. Después tomás unos mates con tu novia y a partir de ahí sigue creciendo. Para nosotros Maltería es eso.

HSJ: Para meternos un poco en lo futbolístico. Recién mencionaste que uno de los motivadores más importantes a la hora de recuperar el club fue el equipo de fútbol del que formás o formaste parte ¿cómo es tu vida como deportista?

G: Hoy por hoy la función que tengo con Maltería es la de ser entrenador. Toda la parte de lo que sería técnica y estrategia la hago yo porque ya no me da para jugar, hace un tiempo que me retiré del fútbol. Sí entreno dos veces por semana, hago gimnasia y demás, pero eso es aparte de esta nueva tarea que es haber metido lo más profesional posible dentro de un grupo que juega fútbol amateur. Es decir, entrenamos martes y jueves, hay profes con nosotros, hacemos trabajos con pelota y llevamos adelante una preparación igual a la de cualquier equipo de primera división.

HSJ: En esta función de técnico que marcás ¿cómo sos? ¿te definís Bilardista, Menottista o Bielsista?

G: A nivel estratégico yo trato de no ser de alguien. Yo creo que tenés que ser un poco de todos. Sangre Bilardista tengo, Menottista también y Bielsista es lo que más me gusta. Creo que ellos tres demuestran pasión y querer tener el protagonismo absoluto del partido y eso es lo que más me gusta. Yo quiero estar lo más lejos de mi arco posible teniendo la pelota, pero siempre, sea empatando, perdiendo o ganando, siendo protagonista. Si pierdo y erré un montón de goles y tuvimos la posesión del balón, yo voy a estar conforme porque estamos detrás de una idea.

HSJ: Ese sistema de juego que marcás requiere una preparación muy grande, un entrenamiento muy exigente ¿es difícil hacer que un jugador totalmente amateur acepte hacer tanto sacrificio y se exija tanto?

G: Sí, claro. Yo lo que le digo a los muchachos es que tenemos que tratar de ser únicos y que por ser únicos nos fue tan bien el torneo pasado. Fuimos los únicos que entrenamos martes y jueves, que hicimos entrada en calor, que teníamos charla previa y que hasta incluímos los videos después y antes de cada partido para que se vean. A partir de eso, como nos dió resultado, de los 23 equipos que hay en la liga, 7 u 8 empezaron a entrenar, a tomarse las cosas en serio y creo que nosotros terminamos nivelando para arriba el campeonato.

HSJ: Participan, y son bi campeones, de la Liga de Don Bosco ¿qué tan picante es?

G: Cualquier torneo que vos veas a nivel amateur es fiel reflejo del argentino. Futbolísticamente te encontrás con gente que maneja el balón o que pone un poco más de pata pero todo con mucha intensidad. Los partidos se viven así, como si fuese cualquier equipo profesional. La liga está en un nivel muy alto e incluso se pueden ver ex jugadores que contribuyen a aumentar ese nivel y que no se pueden relajar, que tienen que hacer lo mismo que hacían cuando jugaban.

HSJ: Si alguno de tus jugadores se encuentra con algún idolo de la infancia en frente ¿vale la foto o el que está del otro lado es un enemigo?

G: No, nosotros tenemos que respetar una camiseta y al lugar que representamos, entonces no. Es más, hemos implementado el tercer tiempo, porque una de mis pasiones es copiar, si se puede, de otros deportes todo lo que el fútbol nunca pudo. Por eso después de los partidos hemos invitado a los demás equipos a comer una picada o tomar una Coca para, justamente, desmitificar eso negativo que tiene el fútbol.

HSJ: Para terminar ¿que sueños tenés tanto para Maltería como en lo personal?

G: Yo creo que el modelo de Maltería ya está establecido y va a seguir creciendo solo. Como objetivo personal tengo uno lindo y es que me gustaría, sea como entrenador o Manager -como hace Bassedas en Vélez o Romeo en San Lorenzo- encabezar un proyecto para llevar a la Asociación Deportiva Berazategui a la Primera B Nacional dentro de 7 u 8 años. Es un poquito ambicioso, pero para mi tenemos en Berazategui un potencial enorme que es un club afiliado a AFA, por más que esté muy descuidado hoy en día. A mi me genera un poco de envidia sana ver clubes como Arsenal, Defensa y Justicia, Tristán Suarez, Villa San Carlos y muchos más que están tan identificados con una ciudad y triunfan, mientras que el nuestro deambula por lugares que no debería. Es ambicioso, pero bueno, vos me preguntaste por un sueño y te lo respondí.


        imprimir

Complejos deportivos Maltería Hudson Germán Mateos

Comentarios | Dejá tu comentario


BIENVENIDO a la COMUNIDAD

HoySeJuega.com |Ingresa Ya!


 
 
 

  • #Hoysejuega en Facebook

  • #Hoysejuega en Twitter

  • #Hoysejuega en Instagram

    Instagram

INSTAGRAM

Seguinos @hoysejuega

ir arriba